lunes, 25 de febrero de 2008

LA COSTA

Si fuera abedul el sol podría recibirme
pero debo guardar sombra.

El llanto de mi naturaleza
se parece a la huella del mar.

Varada, evado la insolación
sosegadamente escribo.

El viento empuja mis bordes.


3 comentarios:

Anónimo dijo...

Me encantó ese final, inmejorable.

Uriel Nicolás dijo...

...lindo lindo!

en el blog puse las palabras q t mande, con algunas correcciones


beso

GLEBOKO FILMS dijo...

este es hermoso
un proceso que se va gestando
mutando como una mitologia